Mezcla de realidad y deseo, el
autor expresa de una manera personal sus pensamientos abriéndose al mar en su
cotidiano paseo. Escuchar el sonido de las olas y sentir la caricia de la brisa
es el ambiente perfecto para hacer fluir la inspiración escribiendo profundos y
sentidos versos sacando a flote el alma como si de un velero se tratara.